Antes de que los Juliolovers empiecen a crucificarme y/o insultarme aviso que haré esto mismo con los demás candidatos antes del día de las elecciones. Enunciare los motivos por los que Sí votaría por tal o cual candidato, motivos por los que No lo haría. Pros y contras y una decisión final que irá en el título. Será una especie de reflexión electoral que compartiré con ustedes.Aun no decido cuál será el próximo candidato del que hablaré, si quieren alguno en especial déjenlo en los comentarios. Bueno empecemos:

 

 

Por qué Sí votaría por Julio Guzmán

 

• El tipo es capaz e inteligente y tiene un cv más que interesante, parece ser que, por lo menos, en el ámbito profesional está bastante capacitado para ejercer el cargo, de ahí a que realmente lo haga bien si gana ya es oooootra historia, pero las capacidades parece tenerlas.

 

• Porque es el candidato que más énfasis ha puesto en la necesidad de reformar y modernizar el estado y yo siempre he pensado que el hecho de que el estado peruano sea una pesadilla kafkiana es uno de los principales y más graves problemas que tiene éste país.

 

• Es un buen candidato, que entiende que la política es un juego de gestos y discursos y ha logrado salir del grupo de “otros” y agrandarse a punta de un marketing ingenioso y bien llevado, quizá el mérito no sea suyo si no de su equipo pero saber rodearse de gente competente, es también una virtud.

 

• Aunque de forma muy ambigua y general, es uno de los pocos candidatos “punteros” que ha dedicado un espacio decente a la cultura en su plan de gobierno. Generalmente estas partes de los planes suelen ser relleno y terminan siendo letra muerta pero como gesto está bien y es importante, quién sabe, quizá sí le interese el tema.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Por qué No votaré por Julio Guzmán

 

•  No tiene partido. Esa pantomima que hace junto a sus fans y alguno que otro candidato al congreso adoptado de otras combis de campaña no es nada, ni remotamente parecido a un partido político de verdad. No hay detrás de Guzmán ni de su consorte una agenda ideológica real, una visión de país o una forma política de entender el mundo o la economía.

 

• Esta falta de ideas y pensamientos ocultan un pragmatismo salvaje que, por lo menos a mí, me resulta bastante preocupante.

 

•  Para outsiders sin partido, ni pasado ya tuvimos un chinito que parecía muy decente, simpático y diferente al resto y ya vimos lo que pasó; fue peor que todos los demás.

 

• Entiendo que muchos estén cansados de la política y “los dinosaurios” pero una democracia real sin partidos políticos es imposible. Una democracia sin partidos es la institucionalización del caudillismo y los caudillos como ya sabemos, tarde o temprano, terminan caminando al autoritarismo o la dictadura. Si no me creen miren lo que fue Fujimori para nosotros, lo que fue Chávez en Venezuela y en lo que, quizá, podría convertirse Julio Guzmán.

 

• Tampoco votaría por Guzmán por todas las contradicciones y medias tintas en temas importantes: primero no sabía si apoyaba la unión civil y luego de las críticas era el más ferviente impulsor del matrimonio homosexual. Primero dice que sí a la consulta previa, la pone en su plan de gobierno y dice que la apoyará y potenciará y luego sale en televisión nacional a contradecirse a sí mismo y a su plan de gobierno. (y recién está empezando la campaña, quien sabe en cuantas cosas más se diga y desdiga hasta abril)

 

• Las contradicciones y el hecho que cambie de postura según a quien le hable me hace pensar que es otro mentecato de balcón, alguien que se acomoda al gusto del oyente y oculta sus convicciones reales.

 

• El hecho de que alguien, de un día para el otro, decida que quiere ser presidente, sin trayectoria, sin carrera política, sin un cargo público previo que nos permita evaluar su capacidad política y su desempeño como funcionario público, me hace desconfiar de él y de sus intenciones. 

  

En resumen, como ya habrán inferido por el título, dudo muchísimo que al final de la campaña vote por Guzmán, mis razones para no hacerlo son muchas más y mucho más importantes que los motivos para sí votar por él.